JARDINES
DEL MUNDIAL 82 (Chamartín)
Paseo
de la Castellana, 142.
Metro:
Santiago Bernabéu (línea 10). Buses: 14, 27, 40, 126, 147 y 150.
Existe
en la capital un lugar tan curioso y atractivo para los aficionados al fútbol
como para aquellos que simplemente disfrutan conociendo los rincones más
desconocidos de la ciudad. Se trata de los Jardines del Mundial 82 -así
llamados de manera literal-, que están situados justo enfrente del estadio
Santiago Bernabéu, lugar donde se disputó el partido final de aquel
acontecimiento deportivo.
Si
nos remontamos a aquellos lejanos años -treinta nada menos-, hubo dos o tres
pequeños hitos que deslumbraron a los madrileños. Uno de ellos fue la pasarela
que cruzaba el Paseo de la Castellana desde el Palacio de Exposiciones y
Congresos hasta la acera situada al otro lado de la gran avenida, algo más
arriba de la calle Concha Espina. Aquel puente cerrado terminó en la M-30 y fue
en su día una de las aportaciones del Mundial a la ciudad de Madrid.
También
se celebró una feria en el Paseo de Recoletos con toda esa mercadería que hoy
se reivindica como vintage… y poco más quedó en el Foro de aquel hito futbolero
en el que la selección de Emilio Santamaría hizo el ridículo como anfitriona.
Todo eso pasó y ya es sólo recuerdo, pero lo que sí quedó fue este parterre
deportivo con representaciones botánicas de todos los países y selecciones
participantes.
Cada
tipo de árbol está rodeado de una misma jardinera redonda formada por ladrillos
en curva vertical. Esta particular disposición sirve para distinguir las
plantas y árboles de las 24 nacionalidades y aumentar su visibilidad y
singularidad a ojos del paseante. Se trata de un diseño de jardín muy atractivo
y que en su día resultaba de lo más moderno y rompedor.
Resulta
muy curioso comprobar cómo aún siguen ahí las banderas de Estados ya
desaparecidos, como Alemania Federal, Checoslovaquia, la Unión de Repúblicas
Socialistas Soviéticas (URSS) y Yugoslavia. Junto al nombre de cada país
destaca la identificación de la especie arbórea junto a su nombre científico en
latín.
Para
completar este mini parque temático dedicado al fútbol se erigió a mediados de
los años 90 un busto de Pedro Escartín. Este antiguo seleccionador nacional y
árbitro fue quizás el primer·”trencilla” mediático de la historia del
periodismo deportivo español. Fue el autor de un reglamento oficial comentado
hasta la saciedad, que era la Biblia del mundo arbitral nacional. El Comité de
Árbitros y el Ayuntamiento de Madrid fueron los impulsores de este homenaje.
Para
acceder directamente a los Jardines del Mundial 82, nada mejor que hacerlo por
la salida menos concurrida de la estación de Metro Santiago Bernabéu
-originalmente inaugurada con el nombre de Lima-.